lunes, 2 de febrero de 2015

INTERVENCIÓN PSICOMOTRIZ EN EL ÁMBITO EDUCATIVO: 0-3 AÑOS (PRIMER CICLO E.I.)

Tal y como proponemos en el título de este blog y como corrobora Herrero (Herrero, 2000), esta etapa 0 -3 años,  se caracteriza por la globalidad. La intervención psicomotriz ha de tener como punto de partida el reconocimiento de la estrecha vinculación entre cuerpo, emoción y actividad cognitiva (pensamiento, emoción y acción, en nuestro blog). El niño utiliza el cuerpo, la acción y el movimiento como instrumento de relación consigo mismo, con otras personas y con su entorno: es su forma de expresión, comunicación e interacción con el medio que le rodea.

En la escuela infantil hemos de proporcionar a los niños la estimulación necesaria para contribuir al desarrollo global, equilibrado y armónico de todas sus potencialidades: cognitivas, afectivas, motoras, relacionales y sociales. La intervención psicomotriz en estas edades tempranas ha de tener también un carácter preventivo, detectando precozmente los trastornos psicomotores o dificultades en el desarrollo del sujeto que afectan a la actividad global en su relación con el entorno (Chokler, 1988). 

Esta práctica se enmarca en una metodología educativa donde el niño es protagonista de la acción a través de su cuerpo en movimiento, lo cual implica contemplar: (Herrero, 2000)
• La emoción como parte esencial de la vivencia educativa y de aprendizaje. 
• La motivación que parte de sus necesidades objetivas (producto del propio proceso evolutivo del niño), o subjetivas (producto de sus deseos, temores,...).
• El respeto al ritmo evolutivo de cada niño.


SISTEMA TÓNICO - EMOCIONAL
Para Wallon (1976) el tono conecta lo biológico con lo psicológico, y tiene tres funciones fundamentales:
•Tono muscular que mantiene a los músculos estriados y que posibilita la postura y el movimiento: función puramente motriz. 
• Como base del movimiento configura las actitudes, siendo el tono el intermediario entre el acto y la situación que la desencadena: función cognitiva, ligada a la atención o reactividad cerebral. 
• Tono como expresión y regulación de las emociones: función afectiva.



Cuando el niño nace, su tono muscular es hipotónico en el tronco e hipertónico en los miembros y sus movimientos se caracterizan por ser: o bien actos reflejos (respuestas motoras innatas a determinados estímulos) o movimientos espontáneos (no controlables, autónomos, no responden a ninguna estimulación concreta). Los utiliza para poder conectarse con el mundo que le rodea, del que es completamente dependiente. Pero éstos sólo pueden ser eficaces para la supervivencia si hay alguien en su entorno que responda a esa expresión de necesidades que muestra el niño. Surgen de aquí lo que se denomina vínculo de apego y diálogo tónico. Según Ajuriaguerra (1986) el“diálogo tónico” es esa función primaria de comunicación que se establece en un proceso de adaptación recíproca que tiene lugar a lo largo de las dos o tres primeras semanas tras el nacimiento. La eficacia de este primer sistema de señales y la forma en que se establece, con sus particulares vicisitudes (tensiones, frustración, satisfacción…) condicionarán el posterior desarrollo de la personalidad del sujeto.

Todo el trabajo que realiza la Psicomotricidad como técnica para actuar sobre las capacidades psíquicas de los individuos a través del trabajo corporal, ya sea para estimular, modificar, reinstaurar... dichas capacidades (emocionales, relacionales/sociales, cognitivas, sensoriomotoras, etc), parte de la relación que el psicomotricista establece con el niño o sujeto de la intervención. Y esta relación es básica y primeramente corporal, establecida en torno al diálogo tónico. Solamente desde el establecimiento de esta comunicación primaria, basada en el respeto, la escucha, la aceptación, pueden trabajarse los aspectos instrumentales, funcionales, cognitivos, relacionales, del acto psicomotor.  A través de las diferentes propuestas psicomotoras, el niño de esta etapa educativa, en su relación con los objetos, el espacio, los otros, o con la figura del adulto, va a introducirse en vivencias  tónico-emocionales: expresión tónica de placer o displacer, descargas pulsionales de rabia o frustración, relaciones con el objeto, distensión tónica ante situaciones de relax y tranquilidad, signos de torpeza ante la presencia de otros,...


SISTEMA TÓNICO - POSTURAL
El tono: grado mínimo de contracción de una fibra muscular que permite mantener un grado de tensión. La postura: adaptación corporal al espacio, dependiente de reflejos. Y el equilibrio: interacción de varias fuerzas, la gravedad y la fuerza motriz de los músculos esqueléticos, que permite la estabilidad postural, el mantener y controlar posturas, posiciones y actitudes. 

A lo largo de los tres primeros años de la vida del niño, deben hacerse planteamientos psicomotores centrados en aportar al niño toda la estimulación necesaria a nivel de regulación tónica y postural que le permita ir adquiriendo control sobre sus movimientos, con cada vez mayor precisión y estabilidad. Además, toda la actividad postural y equilibratoria se va a ir organizando en torno al eje corporal, lo que va a ir organizando un cuerpo lateralizado. Al finalizar este primer ciclo, en torno a los cuatro años, va a definirse en la mayoría de los niños la dominancia manual, proceso básico sobre el que iniciar el posterior trabajo grafomotor y preparación a la escritura, que se inicia en el segundo ciclo de la educación infantil


INTERVENCIÓN PSICOMOTRIZ 0-3 AÑOS
La intervención psicomotriz en la escuela infantil en su primer ciclo (0-3 años), va a favorecer principalmente:
 • Los intercambios tónico-emocionales, que permiten la apertura al espacio exterior y la relación con los objetos y los otros. 
• La integración del sistema postural que permite la autonomía en los desplazamientos y el dominio del espacio exterior.
• El inicio del control motor, que permite la anticipación del movimiento y la inhibición motora (García Núñez, 1993).

La interacción que tiene el educador con el niño es muy cercana, directa e implicante (para ambas partes) y el educador tendrá que estar especialmente atento a la calidad de comunicación que se establece. 
Por otro lado, tras estudiar las características de cada etapa y observar el nivel madurativo de cada niño, elegiremos los materiales y propuestas adecuadas, respetando siempre el ritmo madurativo y evolutivo de cada niño/a.
En general para cualquier edad, los juegos sin objetos van a favorecer el control postural, los juegos con objetos el proceso de lateralización, y los juegos sobre objetos el equilibrio:
- Los objetos blandos (balones grandes, pelotas blandas, telas, cojines, peluches…), son mediadores emocionales, fomentan el placer motriz y el placer en la relación y aportan informaciones tónicas y  propioceptivas  básicas para el desarrollo de procesos posturales.
- Los objetos duros (aros, tacos de madera, etc), facilitan procesos instrumentales, de control motor, implican, desde el punto de vista emocional, distanciamiento y separación, y fomentan la autonomía.



Ejemplo actividades intervención psicomotriz 24-36 meses

1. Situaciones de juego tónico-posturales:
  • Juegos sobre balones grandes: tumbado, sentado. Ajustes tónicos a diferentes ritmos. 
  • Arrastres y transportes de objetos.
  • Arrastres sobre telas, en diferentes posturas con cada vez menor superficie de contacto corporal con el suelo, y con ajuste postural a diferentes ritmos y contrastes. 
  • Equilibrio en altura, con y sin apoyos, y de mayor a menor base de sustentación. 
  • Salto desde altura, sobre superficies blandas.
  • Desplazamientos sobre distintas superficies, también inestables. 
2. Situaciones de desarrollo del esquema corporal:
  • Reconocimiento corporal: señalar partes del cuerpo, frente al espejo, o sobre el cuerpo del otro. 

3. Estimulación de procesos espacio-temporales 
  • Generalización de las nociones de dentro-fuera, en desplazamientos. 
  • Integración de los conceptos rápido-lento: Variaciones de velocidad en los desplazamientos. 



4. Juegos de estimulación de las praxias 
  • Encajes, enrosques, ensartes, construcciones. 
  • Rasgado de papel.
  • Lanzamientos de pelota a corta distancia, con las dos manos. 






5. Estimulación de la actividad grafomotriz
  • Garabateo sobre superficie de papel grande, con ceras blandas.
  • Rellenar con pintura de dedos espacios delimitados sobre el papel (García Núñez, 1993)




Aquí os dejo un ejemplo de una sesión de psicomotricidad con un grupo de niños/as de 3 años:




Y...pese a que no es propiamente el tema del blog, creo que nos puede resultar clarificador. He encontrado un vídeo donde una TSEI, que trabaja como educadora en un aula 2-3 años, comenta su experiencia como tal y las rutinas y actividades que realiza con su grupo-clase. Puede resultarnos interesante conocer de primera mano cómo es esa realidad. Y... quién sabe si dentro de un tiempo nosotras podremos hacer uno como éste.  https://www.youtube.com/watch?v=cskwcdOLATg


BIBLIOGRAFÍA
AJURIAGUERRA, J. (1986). “Organización neuropsicológica de algunas funciones: de los movimientos espontáneos al diálogo tónico-postural y a las formas precoces de comunicación”. Revista Psicomotricidad, 23, 17-34 [Traducción del original en francés, Revista Enfance, 2-3, 1985].

CHOKLER, M.H. (1988). Los organizadores del desarrollo psicomotor. Buenos Aires: Ediciones Cinco.

GARCÍA NÚÑEZ, J.A. (1993). “Actividades psicomotrices para niños de 0 a 3 años”. En M.D. Requena y B. Vázquez-Dodero (Dir.), Desarrollo Cognitivo y Motor (pp. 151-179). Madrid: Ministerio de Educación y Ciencia.

HERRERO, A. B. (2000): «Intervención psicomotriz en el primer ciclo de Educación Infantil: estimulación de situaciones sensoriomotoras», en Revista Interuniversitaria de Formación del Profesorado, n.º 37, pp. 87-102. Recuperado de www.aufop.com/aufop/uploaded_files/articulos/1223462770.pdf

WALLON, H. (1976). La evolución psicológica del niño. Barcelona: Grijalbo.